En nuestro país es muy habitual que los hijos permanezcan en casa hasta pasados los treinta años. Eso puede deberse a diferentes motivos: la falta de pareja que anime a buscar un nuevo hogar, la intención de ahorrar mientras se está trabajando, o la falta de trabajo o de un sueldo que permita buscar una vivienda independiente. Sin embargo, en algunos casos los padres se ven obligados a mantener a unos hijos adultos que ni trabajan ni estudian ni tienen intención de hacer nada para generar unos ingresos. En esos casos la pregunta es evidente: ¿tenemos que mantener a nuestros hijos? Como abogados de familia en Palma de Mallorca vamos a intentar ofrecerte algunas reflexiones al respecto.

En realidad, no se puede decir que haya una edad concreta en la que los progenitores dejen de tener la obligación de cuidar de sus hijos. La pensión de alimentos respecto a los hijos se mantiene incluso aunque éstos tengan la mayoría de edad, siempre que no sean independientes económicamente. Eso sí, se requiere que convivan en el domicilio familiar y que estudien o mantengan una voluntad decidida de incorporarse al mercado de trabajo.

Dicho esto, en los casos más extremos se puede solicitar por vía judicial una cesación de esa obligación. Para ello habrá que acreditar que el hijo, teniendo capacidad para independizarse y conseguir un empleo, no lo hace.

No obstante, en caso de que te encuentres en una situación parecida te aconsejamos que hables con un equipo de abogados de familia en Palma de Mallorca por lo que puedes contar con nosotros.

En el despacho de Juana Amengual Tomás Abogado te ayudaremos a solucionar los casos más graves en las relaciones familiares. Intentamos, siempre, buscar unas soluciones consensuadas y que no resulten traumáticas para ningún miembro.